La seguridad y salud en el uso de plásticos en juguetes es un tema que preocupa a muchos padres y responsables del bienestar infantil. Actualmente, los plásticos están presentes en la mayoría de los juguetes, lo que genera preguntas sobre los riesgos asociados a estos materiales. ¿Qué plásticos son seguros para los niños? ¿Qué precauciones debemos tener en cuenta a la hora de comprar juguetes?
En Atienza y Climent, como fabricantes integrales de productos, entre ellos juguetes, sabemos que esta es una preocupación seria y que merece atención, por eso hemos preparado este artículo en el que resolvemos tus dudas para que sepas hacer una buena elección a la hora de adquirir productos para niños.
¿Te interesa? Vamos.
Riesgos asociados con el uso de plásticos en juguetes
El uso de plásticos tóxicos en juguetes puede suponer un riesgo importante para la salud de los niños. Algunos plásticos, especialmente los de mala calidad o no regulados, pueden contener sustancias químicas nocivas como el BPA, los ftalatos o metales pesados, que se liberan con el tiempo o bajo ciertas condiciones, como el calor o la exposición al sol.
Los juguetes que no cumplen con las normativas de seguridad pueden representar un peligro para los más pequeños, ya que los niños tienden a llevarse todo a la boca, aumentando el riesgo de exposición a estos compuestos. Elegir juguetes que garanticen estar libres de estas sustancias es un primer paso para evitar problemas de salud a largo plazo.
Seguridad de los plásticos biodegradables
En respuesta a la creciente preocupación por el impacto de los plásticos tradicionales, han surgido otros materiales como una opción más segura para la salud y respetuosa con el medio ambiente. La seguridad de los plásticos biodegradables es un tema cada vez más relevante en la industria juguetera, ya que estos materiales ofrecen una alternativa más saludable y menos contaminante.
Qué son los plásticos biodegradables
La búsqueda de materiales seguros para juguetes infantiles ha dado como resultado el hallazgo de los plásticos biodegradables, que son aquellos diseñados para descomponerse de manera natural gracias a la acción de microorganismos. Estos plásticos se elaboran a partir de fuentes renovables, como el maíz o la caña de azúcar, haciendo de ellos una opción más sostenible y menos tóxica.
Es seguro el plástico biodegradable
Uno de los beneficios de los plásticos biodegradables en juguetes es que no contienen las mismas sustancias tóxicas que los plásticos tradicionales, como el BPA o los ftalatos. Al estar fabricado a partir de materiales orgánicos, son menos propensos a liberar compuestos dañinos, es por esto por lo que son una opción más segura para los niños. Sin embargo, es importante que estos plásticos también cumplan con las normativas de seguridad antes de su utilización en la elaboración de juguetes infantiles.
El BPA en juguetes
Uno de los compuestos más controvertidos en la fabricación de juguetes es el BPA, una sustancia química presente en muchos plásticos. El impacto de los plásticos en la salud infantil ha llevado a muchos países a regular el uso de este compuesto en productos para niños, como los juguetes, el menaje y los biberones, debido a sus posibles efectos negativos.
Qué es el BPA y dónde se encuentra
El BPA, o bisfenol A, es una sustancia química que se utiliza para fabricar ciertos plásticos y resinas. Uno de sus usos más comunes está en la fabricación de botellas, envases y juguetes. La importancia de juguetes libres de sustancias tóxicas radica en evitar este tipo de compuestos que, a largo plazo, podrían tener efectos negativos en el desarrollo infantil.
Riesgos del BPA para la salud infantil
Uno de los mayores riesgos del BPA en juguetes infantiles es la posibilidad de afectar al sistema endocrino de los niños, interfiriendo con sus hormonas y, potencialmente, con su desarrollo. Algunos estudios han relacionado la exposición al bisfenol A con problemas de salud como la obesidad infantil, problemas de comportamiento y alteraciones en el desarrollo neurológico. Por todo ello es importante elegir juguetes que indiquen claramente que están libres de este compuesto.
Uso de juguetes de plástico viejo
Es común que los juguetes se reciclen o reutilicen, pero no siempre esta no siempre es la opción más segura. Con el tiempo, los plásticos pueden degradarse, lo que plantea dudas sobre la seguridad de los juguetes de plástico viejos y su impacto en la salud de los niños.
Degradación de plásticos con el tiempo
La exposición a la luz solar, el calor y el uso continuo provocan la degradación de los plásticos con el tiempo, este proceso puede generar la liberación de sustancias químicas dañinas. Los juguetes más antiguos, especialmente aquellos que fueron fabricados antes de que existieran normativas al respecto, pueden ser peligrosos. Es importante en estos casos, tener ciertas precauciones con los juguetes de plástico que no son nuevos.
Es seguro que los niños jueguen con juguetes de plástico viejos
Aunque pueda parecer una opción más económica y ecológica, la seguridad de los juguetes de plástico viejos debe examinarse con cuidado. Si bien algunos de ellos pueden seguir siendo seguros, los que muestren signos de desgaste, rotura o decoloración deben retirarse. Es preferible comprar otros nuevos que cumplan con todas las normativas de seguridad.
Plásticos de origen vegetal como alternativa saludable
Ante la preocupación por los plásticos tradicionales, los plásticos de origen vegetal como alternativa saludable han ganado popularidad en la fabricación de juguetes. Al proceder de fuentes vegetales, son mucho menos propensos a liberar sustancias tóxicas y además son más respetuosos con el medio ambiente.
Algunas de las alternativas saludables al plástico en juguetes son la madera, el caucho natural y los plásticos biodegradables, todos ellos están libres de sustancias como el BPA o los ftalatos.
Consejos para elegir juguetes seguros
Si te preocupa este tema, pero no sabes cómo elegir juguetes seguros para los niños, aquí tienes algunos consejos para hacer una buena elección:
- Busca el certificado CE: asegúrate de que los juguetes que compres tengan el marcado CE, que garantiza que cumplen con las normativas de seguridad europeas.
- Elige materiales seguros: opta por materiales no tóxicos y certificados como seguros para los niños.
- Evita juguetes viejos o dañados: los de segunda mano o que muestran señales de desgaste pueden ser peligrosos, ya que podrían liberar sustancias químicas nocivas.
- Consulta la edad recomendada: cada juego debe ser apropiado para la edad del niño, tanto por motivos de seguridad como de desarrollo.
- Lee las etiquetas: comprueba que indiquen claramente que están libres de BPA, ftalatos u otras sustancias tóxicas.
Elegir bien en un mercado saturado de productos puede parecer difícil, pero solo prestando atención y conociendo las normativas que rigen este sector, es posible garantizar que los niños jueguen sin riesgos innecesarios para su salud.
En Atienza y Climent lo sabemos, por eso elaboramos todos nuestros juegos, bajo estrictos controles de calidad que aseguren una experiencia segura y divertida para todos.