¿Cuál es el mejor proceso para fabricar piezas de plástico?

Los plásticos están presentes en nuestra vida día a día. Los utilizamos como envases de alimentos; la carcasa de nuestro smartphone y algunas partes importantes de nuestro coche también están hechas de algún tipo de plástico. Pero, ¿cómo se obtienen esas piezas que vemos y usamos cada día?

Existen diferentes procesos para fabricar piezas de plástico. Según el tipo de objeto y el material utilizado, cada una de ellas tiene sus propias ventajas e inconvenientes. En esta guía hablamos sobre los ocho procesos más utilizados a nivel industrial.

Fabricación de piezas de plástico

Tipos de piezas de plástico 

Para empezar, vamos a diferenciar las piezas de plástico en dos grandes grupos según su comportamiento térmico: termoplásticos y termoestables.

Los termoplásticos se reblandecen con el calor y endurecen al enfriarse. Permiten un reciclaje sencillo. Algunos ejemplos son el PVC, polietileno, nylon, acetatos, metacrilatos, etc.

En cambio, los termoestables solo se pueden moldear una vez, si se intenta volver a fundirlos se quemarán. Por lo tanto, no son reciclables. Algunos ejemplos de termoestables: resinas epoxi, baquelita, poliéster.

Definitivamente, los termoplásticos son los más utilizados, pues suponen más del 80% del volumen total. Son aptos para la mayoría de procesos.

Por otro lado, las piezas plásticas también se pueden clasificar según su forma o tamaño:

  • Huecas: botellas, tanques, tuberías.
  • Macizas: mangos, soportes, protectores.
  • Delgadas: láminas, films, bolsas.
  • Pequeñas: engranajes, conectores.
  • Grandes: tanques, depósitos, etc.

Es importante conocer estas diferencias, pues no todos los procesos pueden utilizar termoestables o utilizarse para fabricar cualquier forma.

Procesos de fabricación de piezas de plástico 

Por lo tanto, cada proceso de fabricación de piezas plásticas tiene sus puntos fuertes con respecto a otros en cuanto a capacidad para producir ciertas geometrías, tolerancias, acabados, volúmenes de producción, etc.

Conocer las ventajas y las limitaciones de cada técnica es de gran ayuda a la hora de elegir el proceso de fabricación más indicado para cada tipo de pieza que se requiera producir.

Fabricación de juguetes de plástico

Moldeo por inyección 

La inyección de plásticos es uno de los procesos más versátiles y precisos. El termoplástico fundido se inyecta a presión en un molde cerrado donde solidifica adoptando la forma deseada.

Mediante el moldeo por inyección se pueden obtener muchos tipos de piezas de formas complejas: carcasas, piezas mecánicas, juguetes, etc.

Es ideal para producir grandes series con rapidez y eficiencia.

Extrusión 

La extrusión de plásticos consiste en hacer pasar el polímero fundido a través de un dado que le da la forma deseada.

Es ideal para producir perfiles, tubos, láminas, recubrimientos y películas plásticas. Permite fabricar piezas huecas y delgadas de forma continua.

Moldeo por soplado 

Normalmente, en el soplado de plásticos se calienta una preforma en forma de tubo hasta reblandecerla. Luego se introduce aire a presión para expandir el tubo contra las paredes de un molde y adoptar una forma hueca.

Con este proceso se fabrican diversos productos, como botellas, juguetes huecos, tanques, etc. Es muy versátil para producir piezas huecas de termoplásticos.

Termoconformado 

En el termoconformado, se calientan láminas de termoplástico y luego se las hace tomar forma mediante vacío, presión mecánica o manual.

Se utiliza para fabricar bandejas, estuches, envases, carcasas, etc. Es ideal para producir piezas con formas poco profundas de manera rápida y económica.

Rotomoldeo 

El rotomoldeo consiste en poner el plástico en polvo dentro de un molde hueco que gira en dos ejes mientras se calienta. El polímero se adhiere a las paredes del molde adoptando su forma.

Este método permite obtener piezas huecas de pequeño, mediano o gran tamaño, como tanques de agua, carcasas de motores, juguetes, etc. Es versátil y económico para producir en baja escala.

Inyección-soplado 

La inyección-soplado combina ambos procesos. En primer lugar, se inyecta el plástico en un molde para crear una preforma, luego se calienta y se expande mediante soplado.

Se usa para producir recipientes de paredes delgadas como frascos o botellas. Permite fabricar piezas huecas de alta precisión y complejidad con excelente acabado.

Mecanizado CNC 

El mecanizado CNC utiliza máquinas controladas por ordenador para cortar, perforar o esculpir bloques de plástico y obtener la forma y acabado deseados.

Es ideal para producir prototipos, o series cortas con alta precisión, complejidad y detalles que otros procesos no logran.

También es ideal para crear moldes o piezas decorativas con infinitas posibilidades.

Impresión 3D 

La impresión 3D es uno de los procesos más actuales. Construye la pieza capa por capa depositando el material fundido siguiendo un modelo digital.

Permite fabricar piezas únicas, series cortas, prototipos y modelos sin necesidad de utilizar moldes, aunque a menor velocidad que el moldeo por inyección. Ofrece una total libertad geométrica para diseños complejos.

 

¿Cuál es el mejor proceso para crear piezas de plástico? 

No existe un proceso ideal que sirva para fabricar cualquier tipo de pieza de plástico. Cada técnica tiene sus ventajas y desventajas. Unos son más rápidos, otros más precisos y algunos se sitúan en un punto medio.

La elección dependerá, en último término, del tipo de plástico, la forma, el tamaño, el tamaño de la serie y la precisión requerida para cada pieza.

En definitiva, hay una gran variedad de procesos de plástico que ofrecen una gran versatilidad para crear casi cualquier objeto.

 

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